El Cementerio de los Ingleses.
El cementerio de los ingleses
En esta obra literaria de José María Mendiola, se cuenta, como una niña de nacionalidad inglesa movida por un libro ( Historia de las piedras mágicas ) y una leyenda familiar, decide viajar a San Sebastián, que es el escenario en el que ocurren los hechos hace más de ciento cincuenta años.
Esta niña llamada Virginia de quince años de edad, llega a San Sebastián dispuesta a resolver el paradero de la Azula, una piedra-talismán comprada por un antepasado muy lejano en la India, país al que fue destinado por las tropas inglesas. Este se la entregó a su primogénito Wilham Turner cuando fue destinado a España, y así es como llego la Azula a San Sebastián.
Pero a Virginia no solo le indujo a venir el amuleto, sino también la historia de su antepasado Wilham, ya que su final no era muy concreto.
Para descubrir el final de la historia le ayudará un joven muchacho, tímido y aburrido llamado Pablo que pasaba los mejores ratos del verano junto a los libros.
Pablo dejó impresionados a sus padres, cuando estos vieron que su tímido hijo, tenía una amiga extranjera, y además para colmo Pablo quería que sus padres la recibiesen en casa. Ellos sin más remedio la acogieron en su vieja casa.
Pablo y Virginia fueron de pista en pista, de historia en historia, unas en el museo de San Telmo, otras en un misterioso ciego, pero ninguna tenia un final claro y convincente. En el museo de San Telmo, el bibliotecario, también perseguía la ansiada gema. Este hombre escondió la página donde se encontraba la frase clave, que aunque él no la hallaba no quería dejar la oportunidad a que los niños se toparan con ella, ya que este soñaba con la gema desde supo de ella, a través de un amigo suyo inglés. Y es que en cierto modo, la frase era muy confusa por no decir incoherente en cuanto al contexto. Bien, los dos audaces jóvenes desconfiando del siniestro bibliotecario decidieron colarse por la noche el museo de San Telmo para buscar la página que faltaba. Estos forcejearon el cajón, donde vieron que el bibliotecario guardaba sus papeles, hasta conseguir abrirlo. Allí encontraron al instante la página deseada, los chicos leyeron el texto pero no encontraron nada que les diera luz en el caso. Así que leyeron y releyeron, hasta que Pablo se percató de la frase incoherente.
Esa frase llevó a Virginia, Pablo y el bibliotecario hasta la iglesia de la Virgen del Coro donde se toparon con un diario, que podía ser donde se encontrase la clave. Allí conocieron una versión que más o menos tenía sentido, pero que no satisfago a ninguno.
Cuando se pensaban que la Azula se encontraba en el fondo del mar junto al cadáver antepasado de Virginia, y ella ya estaba a punto de volver a Inglaterra, llegó el bibliotecario que tantas zancadillas puso en la investigación de Pablo y Virginia, para compartir con ellos lo que realmente pasó, que es que la Azula salvo a Wilham ( El antepasado de Virginia ) y a su prometida, Corito, y a si los dos llegaron a las costas inglesas sanos y salvos, se casaron y vivieron felices con la Azula. Este Final satisfizo a todos e incluso al bibliotecario.
Yo, recomiendo este libro, porque en mi opinión además pasar un buen rato de lectura, también este nos transmite que debemos descubrir nuestros orígenes, como hizo Virginia, otro valor, es que hay que vencer a nuestros temores, como los venció Pablo, también nos enseña, a que no debemos obsesionarnos por las cosas, en el caso de bibliotecario con la gema, pero creo que el más importante de todos de los que transmite el libro, es la amistad, que es representada por Pablo y Virginia.
En esta obra literaria de José María Mendiola, se cuenta, como una niña de nacionalidad inglesa movida por un libro ( Historia de las piedras mágicas ) y una leyenda familiar, decide viajar a San Sebastián, que es el escenario en el que ocurren los hechos hace más de ciento cincuenta años.
Esta niña llamada Virginia de quince años de edad, llega a San Sebastián dispuesta a resolver el paradero de la Azula, una piedra-talismán comprada por un antepasado muy lejano en la India, país al que fue destinado por las tropas inglesas. Este se la entregó a su primogénito Wilham Turner cuando fue destinado a España, y así es como llego la Azula a San Sebastián.
Pero a Virginia no solo le indujo a venir el amuleto, sino también la historia de su antepasado Wilham, ya que su final no era muy concreto.
Para descubrir el final de la historia le ayudará un joven muchacho, tímido y aburrido llamado Pablo que pasaba los mejores ratos del verano junto a los libros.
Pablo dejó impresionados a sus padres, cuando estos vieron que su tímido hijo, tenía una amiga extranjera, y además para colmo Pablo quería que sus padres la recibiesen en casa. Ellos sin más remedio la acogieron en su vieja casa.
Pablo y Virginia fueron de pista en pista, de historia en historia, unas en el museo de San Telmo, otras en un misterioso ciego, pero ninguna tenia un final claro y convincente. En el museo de San Telmo, el bibliotecario, también perseguía la ansiada gema. Este hombre escondió la página donde se encontraba la frase clave, que aunque él no la hallaba no quería dejar la oportunidad a que los niños se toparan con ella, ya que este soñaba con la gema desde supo de ella, a través de un amigo suyo inglés. Y es que en cierto modo, la frase era muy confusa por no decir incoherente en cuanto al contexto. Bien, los dos audaces jóvenes desconfiando del siniestro bibliotecario decidieron colarse por la noche el museo de San Telmo para buscar la página que faltaba. Estos forcejearon el cajón, donde vieron que el bibliotecario guardaba sus papeles, hasta conseguir abrirlo. Allí encontraron al instante la página deseada, los chicos leyeron el texto pero no encontraron nada que les diera luz en el caso. Así que leyeron y releyeron, hasta que Pablo se percató de la frase incoherente.
Esa frase llevó a Virginia, Pablo y el bibliotecario hasta la iglesia de la Virgen del Coro donde se toparon con un diario, que podía ser donde se encontrase la clave. Allí conocieron una versión que más o menos tenía sentido, pero que no satisfago a ninguno.
Cuando se pensaban que la Azula se encontraba en el fondo del mar junto al cadáver antepasado de Virginia, y ella ya estaba a punto de volver a Inglaterra, llegó el bibliotecario que tantas zancadillas puso en la investigación de Pablo y Virginia, para compartir con ellos lo que realmente pasó, que es que la Azula salvo a Wilham ( El antepasado de Virginia ) y a su prometida, Corito, y a si los dos llegaron a las costas inglesas sanos y salvos, se casaron y vivieron felices con la Azula. Este Final satisfizo a todos e incluso al bibliotecario.
Yo, recomiendo este libro, porque en mi opinión además pasar un buen rato de lectura, también este nos transmite que debemos descubrir nuestros orígenes, como hizo Virginia, otro valor, es que hay que vencer a nuestros temores, como los venció Pablo, también nos enseña, a que no debemos obsesionarnos por las cosas, en el caso de bibliotecario con la gema, pero creo que el más importante de todos de los que transmite el libro, es la amistad, que es representada por Pablo y Virginia.
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